06 septiembre 2006

El capitán Jiménez, orgulloso de ser el 'rey de medallas'


Se siente afortunado por llegar aquí, “cuando empecé en un campo de cemento” ·· Ya tiene cuatro medallas en sus vitrinas

Cuando nació su hijo Pablo durante la concentración del equipo en San Fernando, Cádiz, Carlos Jiménez Sánchez (Madrid, 1976) no se podía imaginar que iba a venir con un oro debajo del brazo. El capitán, junto con los otros once golden boys, logró lo que muchos consideran el mayor hito del deporte español. Un logro basado en el respeto y la confianza que les inculcó desde el principio Pepu Hernández. Carlos es el jugador ideal. Todos los entrenadores desean tenerle en sus filas. Sus intangibles son ya muy famosos en el baloncesto internacional. Su generosidad en el esfuerzo se ha visto recompensada con una nueva medalla, lo que le consagra como el jugador nacional con mejor palmarés internacional, ya que acumula, desde 1999, cuatro metales. Ahora toca disfrutar, y de por medio la mudanza de la capital a Málaga, donde comienza una nueva aventura profesional, por primera vez fuera de Estudiantes.

· ¿Con qué momento te quedas de los últimos dos días de celebraciones?

No lo sé... son muchas cosas. Si tuviera que elegir, con el recibimiento en plaza de Castilla y con volver a ver a mi hijo, que, por cierto, está enorme y yo no quiero que crezca tanto. Algo tendré que hacer para que no siga así.

· ¿Y algún SMS que te haya llamada especialmente la atención o de alguien que no te lo esperaras?

No, de nadie en especial, pero sí me ha llamado la atención el tipo de mensajes, porque algunos eran muy emotivos y eso te hace sentirte muy orgulloso de lo que has conseguido.

· ¿Qué se siente cuando eres el mejor equipo del mundo, por encima de todas las grandes potencias?

Una alegría muy grande. Satisfacción y orgullo tras realizar una gran trabajo. Yo me acordé, en mi caso, de todas las personas que habían influido en mi carrera como jugador, desde los inicios.

· Tú te criaste deportivamente en el colegio San Viator, del barrio madrileño de Carabanchel.

Sí, así es, y me siento un afortunado de venir de donde vengo y consideraba justo brindar un recuerdo a mi colegio, donde me formé como jugador y persona, y a toda la gente que estuvo conmigo.

· Y todo esto después de una temporada de luces y sombras, con una situación difícil en el Estudiantes.

No creo que haya sido una temporada mala, sino distinta. El equipo consiguió el objetivo de entrar en los play off por el título y yo, personalmente, fui declarado el mejor alero de la competición, por lo que en el plano individual me fui satisfecho con mi trabajo. El colofón, desde luego, con la selección, ha sido lo mejor de todo.

· Se ha hablado de los distintos secretos que tiene esta selección pero...

Mira, el secreto es que hay un buen grupo. Cuando estás tanto tiempo concentrado, con un objetivo claro, lejos de casa, la convivencia y llevarse bien es muy importante, porque son muchos días y muchos roces, y no siempre es fácil llevarse bien.

· ¿Qué parte de culpa ha tenido Pepu Hernández en todo esto? Tú le conoces perfectamente, ya que has estado muchos años a sus órdenes, desde que debutaste con él en 1994 con el Estudiantes.

Desde que llegó el primer día a la concentración de Cádiz ha basado su relación con nosotros en dos palabras: confianza y respeto, tanto por su parte como por la nuestra. Ha construido un equipo apelando al sentido común y, con ello, ha logrado que el grupo dé lo mejor de sí. Nosotros tenemos talento y una gran capacidad, pero tiene que haber alguien que encauce todo esto, que te motive, y eso él lo ha hecho a la perfección.

· Además, durante la concentración, os dejó bastantes días libres, más que en otras ocasiones, ¿no?

Sí, él ha sido bastante flexible, porque siempre escucha lo que el jugador pide. Si la gente quería descanso y él lo consideraba oportuno, se daba descanso; pero si pensaba que era mejor entrenar, se entrenaba. Pero todo siempre desde el respeto y la confianza.

· ¿Qué tal en la recepción que ayer tuvisteis en el Palacio de la Moncloa del presidente del gobierno José Luis Rodríguez Zapatero?

Bien, es un hombre de baloncesto y se notaba porque estaba al tanto de cosas. El discurso que hizo me pareció bastante sincero.

· Incluso os ha retado a una pachanga, ¿no?

Sí (dice entre risas Jiménez). Ha dicho que, cuando queramos, vayamos a jugar un partidillo.

· Y con la Familia Real, ¿qué tal?

Pues otro tanto de lo mismo. Los he visto muy involucrados y se lamentaban de no haber podido estar en la final del Mundial por el tema de las agendas.

· ¿Qué te dice el ser el jugador con más medallas en la historia del baloncesto español por delante de hombres como Epi, Fernando Arcega o Alfonso Reyes?

Pues que lo que tengo es mucha suerte de formar parte de un colectivo que ha conseguido éxitos tan importantes. Yo concibo el baloncesto como algo colectivo, pero desde luego que es un orgullo ser el jugador español con más medallas, después de haber empezado a jugar a esto en un campo de cemento.

· Esos chicos, que empiezan ahora, os querrán imitar, ser igual que vosotros, y llegar a conseguir todos los éxitos que habéis logrado vosotros.

Sí, seguramente sí, ahora nos mirarán más, y tenemos que ser conscientes de esa responsabilidad. Hay que seguir trabajando en la misma línea e intentar repetir los éxitos que estamos consiguiendo ahora.

· Pero vosotros vais con pantalones vaqueros y camisetas y os lleváis una prima de 90.000 euros y los de fútbol, por ganar el Mundial de Alemania, se hubieran embolsado 540.000 euros y parecen modelos de Armani, ¿no crees que vosotros estáis más cercanos a la gente?

Antes de nada, no sé qué prima cobraremos todavía, pero bueno. Respecto al otro tema, pienso que el deporte profesional tiene cada vez más de espectáculo y menos de deporte. Aquí quien más dinero generan son los que más ganan.

· Parece que esta generación ha nacido para ganar, pero, ¿se aprende a ganar o se nace con ello?

Pienso que los deportistas podemos nacer con unas facultades físicas y técnicas, pero a ganar se aprende. Detrás de todo esto hay una educación, una base, cómo se forja un carácter...

· Y ahora os presentáis en el Europeo de Madrid, el próximo año, como máximos favoritos a conquistar el título.

Bueno, yo no sé ni qué equipos van a participar ni nada. Lo único que sé es que es en nuestro país y llegamos como campeones del mundo y eso, está claro, nos hará estar entre los favoritos. Debemos seguir el mismo camino que nos ha llevado a este gran triunfo en el Mundial de Japón.

· ¿Cambiarías algo de lo que te ha ocurrido en estos últimos dos meses?

Que hubiese sido mucho más corto (entre risas, de nuevo). No, en serio, para tener estos triunfos hay que sufrir antes, pero perderme los primeros días de vida de mi hijo Pablo ha sido complicado y difícil.

Entrevista realizada al correo gallego

No hay comentarios: