22 diciembre 2006

Enfermedad de Alzheimer: Atención profesional es la clave

"Muchos enfermos de Alzheimer todavía son capaces de entender las celebraciones navideñas. La familia no debe ignorarlos, sobre todo si viven en asilos"
La organización de las celebraciones familiares, Navidad y fin de año era una de las tareas favoritas de Gloria Delgado, de 73 años que padece Alzheimer desde hace más de 10 años."Ella era la promotora de todas las celebraciones. Era muy entusiasta y siempre nos reuníamos en su casa", cuenta María Barret, la menor de sus hijos.
Aunque ya no celebran la Navidad en casa de Delgado y ella no es la organizadora, sus hijos y nietos procuran estar a su lado en estas fechas para hacerle sentir el espíritu de la Navidad y para recordarle que la quieren y la extrañan.
Ahora su hogar es un centro especializado en atender a pacientes de Alzheimer.
Barret y sus hermanos jamás pensaron que algún día permitirían que su madre viviera en un lugar ajeno a su ambiente familiar, ni siquiera cuando les dijeron que tenía Alzheimer.
"Desde un principio, cuando supimos el diagnóstico, decidimos con mi madre vender su casa y que se fuera a vivir con una de mis hermanas", dice Barret. "Quién podría cuidarla mejor que nosotros, sus hijos".
Después de varios años viviendo con una de sus hijas, su deterioro mental llegó al punto de no permitirle reconocer algunos riesgos. Hasta las actividades del hogar más simples podían ser peligrosas para ella, pese a la atención que le ponía su familia.
"Decidimos llevarla a un centro especializado en Alzheimer", dijo Barret. "Dejarla ir de nuestro lado fue una decisión dura, pero era lo más conveniente para ella".
Desde entonces Delgado ha pasado más de cuatro años en este centro, pero la atención y constancia de sus hijos no ha cesado. "Estamos muy pendientes de ella y la visitamos con frecuencia", dijo Barret.
Errores comunes
Cuando todavía no se tiene un diagnóstico de Alzheimer o cuando se desconocen los síntomas, se suele discutir con el enfermo para que entre en razón sobre alguna incongruencia que dijo, explica Robert Tan, profesor de Geriatría del Health Science Center de la UT en Houston (UTHSC-H).
Otro error muy frecuente cuando se da en la familia un caso de Alzheimer, según Tan, es creer que los síntomas que se presentan, como pérdida de la memoria, se deben a que la persona está envejeciendo. Tan mencionó además que a veces se tiende a creer que los sentimientos del enfermo desaparecen, pero lo que él suele observar en su trabajo con pacientes es que muchos de ellos, incluso en etapas avanzadas de la enfermedad, pueden sentir tristeza o alegría.
Por eso, recomienda, es una buena idea hacer que participen en las celebraciones de estas fechas. "Disfrutan mucho compartiendo el tiempo con los nietos", dijo.
Uno de los problemas más graves es que quienes los cuidan (o el mismo paciente) dejan de darle los medicamentos que le recetan porque la memoria no mejora, según Santiago Restrepo, neurólogo de la campaña San Antonio Memory Initiative. "Lo que buscamos al recetar las medicinas es frenar un poco el proceso de pérdida de memoria, no mejorar la memoria".
Celebre la Navidad con ellos
  • La integración es clave para disfrutar las fiestas navideñas
  • Ajústese a las circunstancias: si tiene invitados avíseles con antelación de la situación.
  • Haga que el enfermo participe en actividades seguras durante la preparación.
  • Regalos para el enfermo: sugiera brazaletes con su nombre, ropa cómoda, su música favorita y fotografías.

No hay comentarios: